Laura Fernández reseña para El Mundo la última novela de Peter Terrin publicada en España. Terrin explica las dos ideas base de la novela, el nacimiento de una idea para un libro en la mente de un escritor y el trauma por el que pasó su hija Renée.
«Inventé un personaje que era yo mismo pensando en escribir aquella otra novela sobre el escritor famoso y a partir de ahí, el mecanismo de la ficción se puso en marcha», dice. Su personaje, además, permite al lector descubrir cómo surge un libro en la cabeza de un autor y cómo va tomando forma. «Durante la primera parte de la novela todo es muy confuso, pero así es la vida de un escritor. La realidad y la ficción se entremezclan todo el rato, inevitablemente», asegura.